Almacenes Arias, más conocidos como "Saldos Arias", era una empresa de venta de material textil de calidad mediana que se fundó en 1949. Aunque el famoso de los incendio fue el de 1987 en el que murieron diez bomberos, hubo otro incendio anterior en 1964 que destruyó el edificio sin registrar víctimas. Los edificios estaban ubicados en los números 29 y 31 de la calle de la Montera y daban a su espalda con la Plaza del Carmen número 7, en un lugar en el que estuvo emplazada la iglesia parroquial de San Luis (incendiada por militantes del Frente Popular en la primavera de 1936). A estos dos incendios madrileños, habría que sumarle otro incendio ocurrido en 1981 en los Almacenes Arias de Barcelona en el que hubo cinco muertos y doce heridos.
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| 5 de septiembre de 2017. Homenaje a los 30 años del incendio de Almacenes Arias. |
Incendio de 1964
El 21 de enero de 1964, pasadas las tres de la tarde, mientras el local estaba cerrado, se declara un incendio en los Almacenes Arias de la calle Montera tras una explosión en la segunda planta, que pese a destruir todo el edificio no hubo que lamentar daños personales entre sus 275 empleados ni clientes ¿Qué habría ocurrido si se hubiera iniciado en horario comercial y estuvieran esos empleados y clientes dentro?.
A las cuatro de la tarde todo el edificio era una enorme antorcha de fuego, y en ese momento se empezó a desalojar el número 31 de la calle Montera y que el fuego se dirigía hacia su planta baja. Fueron pasto de las llamas sus cinco plantas y sus dos sótanos. Se movilizaron 10 vehículos y 70 hombres. Entre las dotaciones había numerosos tanques-bomba ya que las bocas de riego a las que en un principio se recurrió no tenían la presión suficiente para alcanzar todas las plantas del edificio, lo que dificultó las labores de extinción. También se usaron autoescaleras de 50 y 52 metros de longitud, fallando una de ellas y parándose en la maniobra de repliegue.
Las tareas de extinción se prolongaron hasta las 20:00 de la tarde, y a las 21:00, se replegaron los medios, excepto dos bombas del servicio de bomberos por si se reavivara durante la noche.
El edificio acabó tan dañado que hubo que demolerlo, y se calcuraron unas pérdidas en torno a los 40 millones de pesetas.
Incendio de 1987
El 4 de septiembre de 1987 se recibía en la central del servicio, a las ocho menos veinte de la tarde, el primer aviso por un incendio en la tercera planta de los Almacenes Arias de la calle de la Montera. En el interior había unos 60 empleados y ya pocos clientes, pero el avance lento del inicio del incendio, facilitó la evacuación con calma. Los bomberos apenas tardaron cuatro minutos en llegar e hicieron dos instalaciones por fachada hasta la segunda planta y desde ésta, por las escaleras mecánicas y escalera otra a la tercera. Se accedió al otro edificio de los hermanos Arias ( al número 31) por la tercera planta, ya que no se podía desde la planta baja. Hasta 88 bomberos trabajaron en la extinción de " Saldos Arias". A las 22:30, fue dominado el incendio en el número 29, procediendo a refrescar este edificio y a continuar con la extinción del número 31 que se estaba complicando al estar las puertas obstruidas con paquetes, las escaleras llenas de enseres, e incluso alguna tabicada. A la medianoche, parte de la fachada que daba a la Plaza del Carmen se desmoronó.
El incendio provocó intoxicación por humo en ocho bomberos, pero aproximadamente a las tres menos veinte de la madrugada del día 5, cuando se estaban realizando los trabajos de enfriamiento, sobrevino el hundimiento súbito del número 29, al abrirse un boquete en el sótano que hizo que unas vigas del forjado de las primeras plantas cedieran, arrastrando seis de los ocho pisos del inmueble, sepultando a los diez bomberos. Se continuó con la extinción debido a que era imposible realizar rescates debido al riesgo de caída del muro medianero con el número 31.
Desconocían que el armazón del edificio había sido sometido a obras sin autorización, que provocaron que se hundiese por completo. Los bomberos, de entre 26 y 37 años, murieron sepultados cuando se iba a ordenar el desalojo de la finca al descubrir que corría el riesgo de derrumbe.
En palabras de Emeterio García: «Apreciamos que había riesgo de un colapso y se dio la novedad a los compañeros. Fue cuando se decidió sacar a la gente al ver que el edificio era una trampa. Si se hubiese venido abajo antes pudimos morir muchos más. Si se hubiese derrumbado a las 03.00 h. no hubiera pillado a ningún compañero». «Hubo una concatenación de circunstancias en nuestra contra. Lo primero es que el fuego comenzó en un edificio de armazón de madera y se extendió a un bloque de estructura metálica. Lo segundo es que se hicieron una serie de obras sin permiso. Se montaron unas escaleras mecánicas que pesaban siete toneladas y media cada una y que no tenían autorización. Además, en la terraza transitable había una torre de refrigeración de 10 toneladas de peso, también sin permiso. Y además, la estructura de acero estaba mal soldada y eso provocó que el edificio tuviese un hundimiento súbito».
Rafael Ferrandiz, el jefe del cuerpo en el 35° aniversario del incendio, presente esa noche en los Almacenes Arias, recalcó que: «el edificio tenía además un cierto abandono y que tenía vigas sin protección para el fuego».
Los bomberos trabajaron días seguidos sin descanso para sacar a sus compañeros. Incluso colaboraron bomberos de la Comunidad de Madrid. El último bombero fallecido fue rescatado a las 3:33 del día del día 9 de septiembre.
El alcalde de Madrid, D. Juan Barranco, que estuvo presente durante el incendio, impuso sobre los féretros de los fallecidos la medalla de oro de Madrid, en el patio de Cristales del Ayuntamiento.
Las investigaciones posteriores aclararon que el colapso se produjo por una mala realización de la estructura del edificio reconstruido en 1964 fabricada por La Sociedad Comercial de Hierros SA. En estas investigaciones, el juez A.M. Arrieta, también valoró la intencionalidad, ya que testimonios de testigos y bomberos decían que vieron tres focos del incendio (dos en el número 31 y otro en el 29, los tres en su planta tercera respectivamente). El juez terminó archivando el caso en 1990. Las partes implicadas y los familiares de los bomberos llegaron a un acuerdo para recibir las indemnizaciones
En el lugar de la catástrofe se construyó un edificio, que alberga hoy unos mini cines, y pasados diez años del siniestro, se adosaría al edificio una placa conmemorativa al cuerpo y a los diez bomberos que dejaron allí su vida.
Referencias
Capítulo XXII y capítulo XXIV. Historia del Cuerpo de Bomberos de Madrid (de los matafuegos al Windsor 1577-2005). Ediciones La Librería. 2005. ISBN 84-96470-08-3.
https://www.abc.es/archivo/periodicos/abc-madrid-19640122-23.html
https://urbancidades.wordpress.com/2010/02/09/saldos-arias-un-extrano-final/
https://www.abc.es/archivo/periodicos/abc-madrid-19810312-48.html
https://elpais.com/diario/1988/10/07/madrid/592230259_850215.html
https://www.abc.es/archivo/periodicos/abc-madrid-19870908-31.html
http://esmadridnomadriz.blogspot.com/2012/01/los-misteriosos-incendios-de-los.html
https://elpais.com/elpais/2017/09/05/album/1504599984_590744.html
https://www.chacarrex.com/el-mortal-incendio-de-los-almacenes-arias-en-madrid-cumple-casi-34-anos/
https://www.elmundo.es/madrid/2022/09/06/6315e4aafdddffd1a58b45cd.html
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